ABETOS fLOR DE NEU
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Sólo venta a profesionales
Se recomienda colocar el árbol de navidad en un lugar iluminado y alejado lo máximo posible de las fuentes de calor, radiadores de calefacción, estufas, chimeneas, etc. es conveniente pulverizar a menudo sus hojas con agua, si el árbol tiene raíz también es importante regarlo un poquito cada cuatro o cinco días.
Los abetos que se comercializan por navidad, han sido plantados para este fin y si no se venden no van a quedar como bosque ya que estos campos deberán utilizarse para otros cultivos, peor será si quedan abandonados, ya que están plantados muy juntos y al crecer no entrar la luz y se seca gran parte del árbol.
Los abetos de navidad desde que se plantan hasta que se arrancan, han estado fijando carbono y desprendido oxigeno ayudando así a evitar el efecto invernadero y el calentamiento global, al contrario de los de plástico, derivados del petróleo que contaminan cuando se fabrican y cuando se destruyen.
Los abetos de navidad que no se pueden recuperar para la jardinería sirven para hacer compost natural que servirá para abonar los parques y jardines de las ciudades y pueblos, de un abeto mediano pueden salir de 3 a 5 Kg de compost, contribuyendo así a reducir el consumo de turba natural del norte de Europa.
Muchas personas en los pueblos de montaña viven de los abetos de navidad, operarios en el campo, pequeñas plantaciones familiares etc., si esta tradición se pierde, estas personas se verán obligadas a emigrar a las ciudades, quedando abandonados los campos.
Para llegar a los campos de cultivo sus propietarios se ven en la necesidad de mantener limpios y en condiciones los caminos que llegan a ellos y que discurren en medio de los bosques, caminos que utilizaran los bomberos en caso de un incendio.
Las plantaciones de abetos y en general los campos cultivados que se encuentran en medio de los bosques sirven de cortafuegos, en caso de incendio.